¿Cómo salir de la zona de confort?
Frente a los desafíos e incluso ante ciertos obstáculos, las reacciones de las personas son muy variadas y diferentes. Mientras que unos sienten motivación y ganas de afrontar lo desconocido, existe otro grupo de personas que elige evitar a toda costa este tipo de situaciones.
Los de este último grupo están más cómodos y tranquilos con un estilo de vida dentro de lo que se conoce como la zona de confort.
En este post te explicaré brevemente cuál es su concepto principal, qué lo caracteriza y por qué es fundamental salir de este patrón de pensamiento para dar pasos progresivos y así evolucionar en tu crecimiento personal.
¿Qué es la zona de confort?
Es un lugar permanente en el estilo de vida de las personas donde todo lo que ocurre es conocido, manejable, sin cambios bruscos ni incómodos. En realidad es algo que nos auto imponemos de manera natural y como mecanismo de “protección” (aunque parezca paradójico).
No obstante, por supuesto que existen diversos motivos para que alguien prefiera siempre la zona de confort como su lugar más seguro, confiable y estable para vivir.
Esta seguridad es la que se ha convertido en uno de los elementos más relevantes para quienes escojen quedarse allí. De hecho, quienes están dentro comienzan a sentir altas dosis de ansiedad y de estrés emocional si una situación distinta les resta esa seguridad y estabilidad que tanto atesoran para su vida diaria.
De cierto modo, este confort llega a proporcionar paz mental y a liberarnos de la ansiedad a la que estamos expuestos diariamente debido a los diversos retos y cambios laborales, personales, familiares y/o educativos.
Sin embargo, para otras personas habitar en la zona de confort durante mucho tiempo, sin darle un merecido respiro a su cotidianidad les suele ser perjudicial, ya que consideran que se pierdan oportunidades relacionadas con experimentar, acumular experiencias, desarrollarse ampliamente o alcanzar logros importantes. Así que, les gusta perseguir o necesitan de nuevos cambios o retos en su vida, por pequeños que sean.
Importancia de salir de la zona de confort
¿Por qué crees que puede ser importante salir de la zona de confort?. Seguro piensas en: aprendizaje, crecimiento, evolución, descubrimiento, experiencias, etc. Pues, todas ellas son correctas.
Si bien es cierto que en la vida cotidiana también estamos aprendiendo y creciendo, hacerlo saliendo de nuestra zona de confort nos proporciona un plus EXTRAORDINARIO de mayor valor. Al tener que enfrentarnos a lo desconocido sacando todo nuestro talento y desplegando todo nuestro potencial, propicia la expansión del SER, en eso no hay duda.
Si estas pensando en cómo hacer para salir de esa zona tan cómoda en la que estás, no te preocupes, vé paso a paso, no hace falta saltar al vacio sin paracaídas.
Para salir de la zona de confort, comienza agregando cambios pequeños pero muy significativos a tu rutina diaria. Así irás entrenando a tu cerebro a que los cambios son buenos. Share on XSi haces siempre lo mismo no obtendrás resultados distintos, de ahí que salir de la zona sea uno de los primeros pasos para aprender más y adquirir destrezas que te impulsen a vivir la vida que deseas vivir, a impulsar tu carrera profesional, a emprender tu propio negocio, a ir al siguiente nivel con tu pareja…
Incluso para la vida diaria y en las actividades más sencillas, mantenerse con la mente abierta a experimentar suele ser enriquecedor, por lo que debes soltar esos miedos que te impiden hacer cosas nuevas y emocionantes que encontrarás hasta en las situaciones que parecen mínimas.
Sencillos pasos para salir de la zona de confort
Tómalo con calma. Entiende que nadie te obliga a tirar todo por la ventana así de repente. Se trata de dar pequeños pasos hacia la libertad de hacer y experimentar la vida como lo deseas, de manera natural y saludable para tu crecimiento.
Haz planes. Una de los factores que más sufren limitaciones dentro de la zona de confort son los objetivos a corto, mediano y largo plazo. Por eso, puede ser recomendable elaborar una ruta a seguir que te permita agregar algunos planes a tu vida.
Esto te permitirá añadir nuevas rutinas que a su vez serán útiles para alcanzar una meta y de este modo, podrás asumir riesgos que antes no considerabas.
Toma riesgos. Si tienes dos o más opciones y en verdad quieres salir de esa zona confort en la que te encuentras, ¿por qué sigues tomando las mismas decisiones?
Mejor apuesta por la opción que implica más riesgos, aquella que si bien, no es tan fácil de seguir, sí que puede aportar más beneficios a tu vida tales como experiencias y retos que formarán tu nuevo modo de vida. ¡OJO! Toma riesgos de manera consciente.
Actitud positiva. Uno de los primeros pasos para arriesgar es pensar que es posible. Mantente con una actitud positiva pero también sé realista con lo que quieres lograr. Si no estás preparado para asumir un reto, prepárate más, pero no pierdas una oportunidad de hacer cosas distintas solo por miedos.
Toma la iniciativa. No esperes a que los demás sean siempre los que den la cara frente a los desafíos. Sé el protagonista, ten iniciativa. Te sorprenderá el gran potencial que puedes proyectar haciendo aquello que realmente te apasione.
Supera tus propios limites. Si has llegado hasta este punto, ya superaste las primeras pruebas necesarias para vivir fuera de tu zona de confort. Ahora, llega el momento de superar y trascender tus propias limitaciones. ¡Te harás imparable! 🙂
Atesora experiencias y logros. Los logros personales son los que nos llenan de satisfacción y orgullo conforme pasa el tiempo. Ten los tuyos propios y siéntete capaz todo el tiempo de salir del cascarón para hacer cosas maravillosas para tu vida. Desde ir solo al cine a emprender una aventura por Asia, todo cuenta. Conviértete en un ejemplo a seguir y nunca dejes de aprender.
Hay muchisima más vida que descubrir, más allá de tu zona de confort. ¡Préparate… y a por todas!